martes, 13 de mayo de 2014

pienso en lo que ha pasado, lo que me ha pasado, lo que era, lo que soy, en la filosofía se habla del cambio, de que no existe constante en lo cualitativo, pero si pusiera mi vida cuantitativa resultaría algo monótono, casi tanto como la cualitativa, cosa que se contradice al ser la segunda algo aparentemente interesante al menos para quien se interesa mientras lee esto, tal vez que lo confunda o que le haga encontrar esa pizca de empatía que aveces con un buen escrito, una imagen, o simplemente el gesto de un desconocido por la calle encontramos, tal vez eso, cuantitativo en la cantidad al día y cualitativo en lo que lo caracteriza y nos hace sentir sea lo que hace al menos interesante una vida cualitativa racionalizada desde caracteres cuantitativos, como las letras de este pequeño monólogo que la incomprendida mente humana genera mientras las ideas como flechas atraviezan el cráneo, cualitativo en su forma y cuantitativo como uno de 206 huesos.